Cuando las métricas importan – la gestión visual también
¿Se ha preguntado alguna vez por qué los ávidos fanáticos de los deportes miran el marcador cuando toda la acción está claramente en la cancha? La respuesta es simple: el marcador genera y mantiene el interés. Proporciona una retroalimentación inequívoca sobre el rendimiento y responde a preguntas importantes sobre el estado del juego. Y por analogía, la verdadera gestión visual comparte información en tiempo real y retroalimentación sobre el estado de su operación.
La razón más importante para aplicar la gestión visual es impulsar la resolución de problemas y la mejora enfocada, con el objetivo específico de reducir el tiempo de respuesta y proporcionar a los equipos la información que necesitan para eliminar el desperdicio y otros problemas como la mala calidad. La gestión visual también es una parte fundamental del empoderamiento y la propiedad. El equipo se compromete y se hace responsable de sus actos mediante retroalimentación constante. La gestión visual también contribuye en el logro de una operación más transparente y, por lo tanto, más eficiente.
Ayudar a que los principios lean cobren vida
Uno de los primeros principios lean es observar directamente el trabajo como actividades, conexiones y flujos. Cuando el trabajo es visual y claro se hace mucho más fácil para alguien observar directamente el trabajo y saber lo que está pasando. El manejo visual es por lo tanto un aspecto fundamental de Lean, ya que ayuda a que los principios de Lean «cobren vida». Al igual que un discurso elocuente y bien pronunciado puede llevar a la gente a la acción, la aplicación hábil y juiciosa de las técnicas de gestión visual puede llevar las prácticas empresariales a un nivel más alto de realización y eficiencia.
Cuando la gestión visual se realiza bien, se hace fácil ver y entender el flujo de trabajo y cómo está progresando. Ayuda a:
- identificar situaciones de control y fuera de control
- identificar altos niveles de variabilidad
- identificar las tendencias que son positivas o negativas
El diagrama que figura a continuación refleja la práctica de la gestión visual en un contexto de interacción humana:
Un lugar de trabajo visual es mucho más fácil de manejar con el tiempo. Con técnicas que hacen que el desempeño sea más visible, se necesitará menos tiempo para identificar problemas y cuestiones relacionadas al desempeño. Y lo más importante, la gestión visual hace que sea más fácil impulsar la mejora continua, el verdadero objetivo de Lean.
Integrando el sistema de gestión más amplio de su organización
Una revisión diaria o semanal debe realizarse a nivel situacional. Las revisiones de nivel sistémico también deben realizarse alrededor de los tableros a un tiempo adaptable para todos (es decir, semanal, quincenalmente). Se revisarán más iniciativas estratégicas a nivel de alta dirección mensualmente, con medidas clave revisadas diariamente y semanalmente.
En su sentido más verdadero, la gestión visual es un «sistema nervioso» de toda la empresa que permite a todos los empleados entender cómo impactan en el desempeño general de la operación. Permite a las personas alinear sus acciones y decisiones con la dirección estratégica general de la empresa. Y proporciona una ventana abierta al desempeño de la planta o fábrica, poniendo la misma información imparcial a disposición del propietario, el gerente, el operario e incluso del visitante.
La gestión visual puede aplicarse en tantas áreas que el uso de la herramienta sólo está limitado por la imaginación de sus empleados.
Descrito como «el modelo de oro» para la productividad de la manufactura, la OEE es una medida estratégica que mide la efectividad general de un sitio, línea de producción o máquina, y puede utilizarse para hacer más transparentes las pérdidas, destacar las áreas de mejora y mejorar la utilización del capital y el crecimiento de gastos y ventas. Vea esta serie de seminarios web: Mejorando su OEE para obtener consejos prácticos de expertos.